Versículos bíblicos sobre Superación
Versículos bíblicos sobre Superación
El viaje de la fe está entretejido con desafíos, sin embargo, las Escrituras ofrecen una profunda seguridad de que superar no es solo posible, sino una promesa divina. Profundizar en los versículos bíblicos sobre superar revela el poder disponible para nosotros a través de Cristo. Entender estas Escrituras ilumina el camino hacia la resiliencia, equipándonos para enfrentar la adversidad con coraje y esperanza. Nos recuerdan que no estamos solos en nuestras luchas, sino empoderados por un Dios que ya ha conquistado el desafío definitivo. A través de la fe y la confianza en Su palabra, descubrimos la fuerza para elevarnos por encima de nuestras circunstancias y vivir victoriosamente.
Versículos más útiles
Comienza tu estudio con estos pasajes cuidadosamente seleccionados
Amalec habita la tierra del mediodía; y el Hetheo, y el Jebuseo, y el Amorrheo, habitan en el monte; y el Cananeo habita junto á la mar, y á la ribera del Jordán.
Y cinco de vosotros perseguirán á ciento, y ciento de vosotros perseguirán á diez mil, y vuestros enemigos caerán á cuchillo delante de vosotros.
Para que él eche á todos tus enemigos de delante de ti, como Jehová ha dicho.
Scripture Passages
Cuando dijeres en tu corazón: Estas gentes son muchas más que yo, ¿cómo las podré desarraigar?;
Pueblo grande, y numeroso, y alto, como los Anaceos; á los cuales Jehová destruyó de delante de los Ammonitas, quienes les sucedieron, y habitaron en su lugar:
Las aguas que venían de arriba, se pararon como en un montón bien lejos de la ciudad de Adam, que está al lado de Sarethan; y las que descendían á la mar de los llanos, al mar Salado, se acabaron y fueron partidas; y el pueblo pasó en derecho de Jericó.
Barriólos el torrente de Cisón, el antiguo torrente, el torrente de Cisón. Hollaste, oh alma mía, con fortaleza.
Pues ha echado Jehová delante de vosotros grandes y fuertes naciones, y hasta hoy nadie ha podido parar delante de vuestro rostro.
Porque en ti romperé ejércitos, y con mi Dios saltaré las murallas.
Libróme de fuertes enemigos, de aquellos que me aborrecían, los cuales eran más fuertes que yo.
Ceñísteme de fortaleza para la batalla, y postraste debajo de mí los que contra mí se levantaron.
Y que me saca de entre mis enemigos: tú me sacaste en alto de entre los que se levantaron contra mí: librásteme del varón de iniquidades.
Después, Benaía hijo de Joiada, hijo de un varón esforzado, grande en hechos, de Cabseel. Este hirió dos leones de Moab: y él mismo descendió, é hirió un león en medio de un foso en el tiempo de la nieve:
Ellos arrodillaron, y cayeron; mas nosotros nos levantamos, y nos enhestamos.
Pues me ceñiste de fortaleza para la pelea; has agobiado mis enemigos debajo de mí.
Y dísteme la cerviz de mis enemigos, y destruí á los que me aborrecían.
Libróme de mi poderoso enemigo, y de los que me aborrecían, aunque eran ellos más fuertes que yo.
Porque contigo desharé ejércitos; y con mi Dios asaltaré muros.
Perseguido he mis enemigos, y alcancélos, y no volví hasta acabarlos.
Amalec habita la tierra del mediodía; y el Hetheo, y el Jebuseo, y el Amorrheo, habitan en el monte; y el Cananeo habita junto á la mar, y á la ribera del Jordán.
Y cinco de vosotros perseguirán á ciento, y ciento de vosotros perseguirán á diez mil, y vuestros enemigos caerán á cuchillo delante de vosotros.
Para que él eche á todos tus enemigos de delante de ti, como Jehová ha dicho.
Cuando dijeres en tu corazón: Estas gentes son muchas más que yo, ¿cómo las podré desarraigar?;
Pueblo grande, y numeroso, y alto, como los Anaceos; á los cuales Jehová destruyó de delante de los Ammonitas, quienes les sucedieron, y habitaron en su lugar:
Las aguas que venían de arriba, se pararon como en un montón bien lejos de la ciudad de Adam, que está al lado de Sarethan; y las que descendían á la mar de los llanos, al mar Salado, se acabaron y fueron partidas; y el pueblo pasó en derecho de Jericó.
Barriólos el torrente de Cisón, el antiguo torrente, el torrente de Cisón. Hollaste, oh alma mía, con fortaleza.
Pues ha echado Jehová delante de vosotros grandes y fuertes naciones, y hasta hoy nadie ha podido parar delante de vuestro rostro.
Porque en ti romperé ejércitos, y con mi Dios saltaré las murallas.
Libróme de fuertes enemigos, de aquellos que me aborrecían, los cuales eran más fuertes que yo.
Ceñísteme de fortaleza para la batalla, y postraste debajo de mí los que contra mí se levantaron.
Y que me saca de entre mis enemigos: tú me sacaste en alto de entre los que se levantaron contra mí: librásteme del varón de iniquidades.
Después, Benaía hijo de Joiada, hijo de un varón esforzado, grande en hechos, de Cabseel. Este hirió dos leones de Moab: y él mismo descendió, é hirió un león en medio de un foso en el tiempo de la nieve:
Ellos arrodillaron, y cayeron; mas nosotros nos levantamos, y nos enhestamos.
Pues me ceñiste de fortaleza para la pelea; has agobiado mis enemigos debajo de mí.
Y dísteme la cerviz de mis enemigos, y destruí á los que me aborrecían.
Libróme de mi poderoso enemigo, y de los que me aborrecían, aunque eran ellos más fuertes que yo.
Porque contigo desharé ejércitos; y con mi Dios asaltaré muros.
Perseguido he mis enemigos, y alcancélos, y no volví hasta acabarlos.
Sobre el león y el basilisco pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón.
Sobre el león y el basilisco pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón.
Mucho me han angustiado desde mi juventud; mas no prevalecieron contra mí.
Sobre el león y el basilisco pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón.
La Biblia ofrece una riqueza de aliento y guía práctica para superar los desafíos de la vida. Desde enfrentar el miedo hasta conquistar la tentación y perseverar a través de las pruebas, estos versículos nos recuerdan que no estamos solos en nuestras luchas. Enfatizan la presencia inquebrantable de Dios, Sus promesas de fuerza y liberación, y el poder transformador de la fe. Al meditar en estas Escrituras, podemos cultivar una mentalidad de resiliencia y esperanza, atrayendo recursos divinos para conquistar obstáculos y emerger más fuertes al otro lado. Que estos versículos sirvan como una fuente constante de inspiración y un recordatorio de que con la ayuda de Dios, podemos superar cualquier adversidad y vivir una vida de victoria, reflejando Su luz y amor al mundo.